En esta nueva entrada, vamos a explicar 4 errores comunes al gestionar un inmueble de alquiler, y lo más importante, cómo trabajarlos y que nunca lleguen a aparecer. Conocer estos errores puede ayudar de forma significativa a tu gestión de inmuebles.
Como hemos comentando, anteriormente, la gestión de inmuebles, es una tarea que nace en el sector inmobiliario y que involucra una serie de agentes. Dicha acción puede parecer difícil a primera vista, ya que las empresas que trabajan en este sector, deben lograr el equilibrio y el mantenimiento de forma dual, tanto con el propietario del inmueble como con el inquilino. Todo lo que afecta a la gestión de inmuebles, puede conllevar problemas a pequeña y gran escala, sino que incluso puede afectar a la reputación de la empresa y la pérdida de inquilinos. Durante nuestra experiencia con Renfly hemos coleccionado diferentes vivencias que pueden ayudar a tu nueva era siendo arrendatario.
Uno de los errores más comunes de una gestión de inmuebles recae en no realizar una verificación adecuada de los inquilinos antes de firmar el contrato de alquiler. En este caso, es el arrendatario el que debe llevar a cabo una entrevista con el usuario. Es esencial realizar bien este hecho, ya que va a significar un antes y después en la vida de la vivienda. En Renfe, mantenemos una conexión exhausta con nuestros inquilinos, ya que realizamos un soporte de la vivienda continuo. Una mala ejecución de esta practica, puede llevarnos a impagos daños en las propiedad y demás conflictos.
Son diferentes los procesos que se pueden llevar a cabo para no caer en este error, aunque desde nuestra experiencia pensamos que los puntos más eficientes sería pedir referencias a arrendatarios anteriores, realizar una entrevista personal
Este es otro error muy frecuente entre las empresas de gestión de inmuebles. Hablando desde nuestra experiencia pensamos que es uno de los puntos clave en cualquier empresa de este tipo. Vemos muy convenientes realizar inspecciones o visitas de las viviendas, ya se para gestionar cualquier problema del mobiliario o, en contrapartida, servir de soporte al inquilino.
Desde nuestra perspectiva, el vínculo con el inquilino debe ser duradero y efectivo durante su estancia. Responder sus mensajes, dudas, cuestiones, realizar inspecciones y mantenimientos de la vivienda cuando se necesite
Realiza una guía de convivencia para mantener un protocolo en el cuidado del inmueble. Aunque no es un hábito obligatorio, también podrás realizar inspecciones regulares para que la propiedad se mantenga en su estado inicial y saber que los propietarios están cumpliendo sus responsabilidades de forma correcta.También es importante tener en cuenta que la gestión de inmuebles también incluye tener en cuenta problemas que aún no han ocurrido. De esta forma, podrás prevenir errores
El contrato de arrendatario es un documento fundamental en la gestión de inmuebles ya que es el protagonista en establecer las reglas del inmueble entre el arrendataria (en este caso la empresa de gestión de inmuebles). Un contrato mal redactado, donde no queden claros los puntos clave, puede llegar a ocasionar muchas disputas durante la estancia del inquilino.
Aquí te señalo diferentes apartados que deben de estar sí o sí en un contrato
Un contrato claro, donde se reflejen todas las normas y protocolos es fundamental en una empresa de gestión de inmuebles
La prevención es amiga siempre de cualquier empresa. En el caso de un negocio de gestión de inmuebles aún más. Siempre hay que intentar captar el problema antes de que se vuelva más grave y pueda ocasionar problemas tanto a la empresa como al inquilino. Mantén una revisión constante de la plomería, los sistemas de calefacción, los aires acondicionados, la fontanería y la instalación eléctrica, puesto que este es uno de los cuatro errores más comunes al gestionar un inmueble de alquiler.
Implemente en tus viviendas de alquiler un mantenimiento óptimo y efectivo que resuelva todo tipo de problemas. Por ejemplo, en Renfly solemos llevar a cabo un plan de mantenimiento efectivo, tanto en la parte posterior a la llegada del inquilino, como cuando el usuario ya disfruta de su inmueble. Este plan de mantenimiento debe incorporar: revisión exhaustiva de sistemas claves, desde la calefacción hasta la fontanería, inspección de instalaciones exteriores, donde entran ventanas, techos o puertas. Sin olvidar el mantenimiento de limpieza.
Al conseguir que tu propiedad esté en buen estado y realizar un mantenimiento preventivo, puedes mejorar la estancias de los inquilinos.
En definitiva, la tarea de gestionar inmuebles no solo requiere prácticas administrativas y técnicas, también necesita un enfoque meticuloso y atento a los detalles. En Renfly creemos que la importancia viaja desde las tareas a gran escala, como a la decoración, que para nosotros es nuestro factor diferenciador. Gestionar un inmueble debe de tener en cuenta todo lo que hace referencia a la vivienda, desde la elección del inquilino hasta el mantenimiento de las zonas comunes
Es conveniente que apliques estas opciones a tu gestión de inmuebles o que simplemente las tengas en cuenta, por si en algún momento decides vivir la experiencia.
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